Presupuesto “muy” participativo.

Por Carlos Flores

En la noche del viernes la Junta Departamental de Maldonado aprobó en general, con los votos de los ediles colorados del Proba, el presupuesto quinquenal que signará la acción del intendente del Frente Amplio Oscar de los Santos.  Se trata del tan mentado “presupuesto participativo” que, por tal, reedita acuerdos en épocas del gobierno nacionalista protagonizados por los mismos dirigentes de nuestro partido.

EL PRESUPUESTO

Con mil cincuenta millones de dólares contará la Intendencia de Maldonado para su segundo período al frente del gobierno departamental. Con un déficit de más de 45 millones de dólares, el nuevo presupuesto permitirá la obtención de más créditos cuyos vencimientos pueden exceder el actual período, un aumento significativo en los salarios de los 46 (sí, cuarenta y seis) directores municipales, la anuencia para la venta de tierras de su propiedad y un exacerbado aumento de las contribuciones inmobiliarias. Todo, a costa de proyecciones de recaudación realizadas en tiempos de vacas gordas, sin haber ocurrido el desastre en Japón, las crisis en los países proveedores de petróleo y sin tomar debida nota de las alarmas que se han encendido a lo largo y ancho del planeta.

Agregados los antecedentes de la gestión de De los Santos en el período anterior, cuando se acumuló el déficit y no hubo obras de ningún tipo, todo hace suponer que la firma de este cheque en blanco nos costará, a los vecinos del departamento, sangre, sudor y lágrimas. Y de obras o inversiones, nada.

LO DE MUY PARTICIPATIVO

Lamentablemente asistimos a viejos métodos. Hay que decirlo.

Por participativo, jamás creímos que esta instancia fuera utilizada para acuerdos políticos -que de eso se trata- entre dirigentes de nuestro partido y el gobierno DEPARTAMENTAL del Frente Amplio, realizados en forma inconsulta con los órganos partidarios (léase Comité Ejecutivo Departamental y su órgano máximo, la Convención Departamental del Partido Colorado).

Ni el Comité Ejecutivo ni la convención colorada de Maldonado se han reunido desde hace seis meses. Distinto fue en el último gobierno nacionalista cuando hubo un acuerdo similar; en aquella instancia, al menos, se reunió la Convención Departamental, cosa que dio lugar a que, por lo menos, hubieran voces discrepantes del “acuerdo programático”  de entonces (bautizado en la oportunidad de “acuerdo acomodático” por Honorio Barrios Tassano).

¿Estamos en las mismas? ¿Cómo en aquél entonces, están entrando por la ventana de la Intendencia personas propuestas por gente de nuestro partido, como ocurrió en aquella oportunidad?

Nuestra colectividad política no analizó orgánicamente la forma de “participar” en este presupuesto. Una pena. Casualmente ahora, me llegó la citación para la reunión del Comité Ejecutivo de Maldonado del próximo lunes 11 de abril.

Ya es tarde. El pescado ya fue vendido.