La directora del liceo Bauzá de Montevideo dijo en entrevista con El Observador que la educación atraviesa "una situación institucionalmente muy grave"
La "mediática" directora del liceo Bauzá, Graciela Bianchi - aunque a ella no le gusta que la califiquen así - dijo en entrevista con El Observador que la educación atraviesa "una situación institucionalmente muy grave". En su opinión "el Codicen está totalmente deslegitimado", y más allá de las buenas intenciones del presidente por lograr un acuerdo nacional, "el golpe a la educación pública" lo dan "sectores políticos minoritarios: MPP, PCU y CAP -L, que tienen más cargos que votos".
¿Por qué le preocupa que el presidente del Codicen, José Seoane haya ido a entrevistarse con Mujica acompañado por Nora Castro?
Porque no es casual. Esto fue un problema interno del MPP con sus aliados, especialmente el PCU, y la educación sigue postergada. Y lo que me preocupa es volver a lo que yo dije en mi renuncia (al Codicen en 2010): me preocupa la disociación entre la actitud del presidente de la República, que es conciliadora, que trata de canalizar los conflictos, que es la de acercarse a la oposición, que busca grandes acuerdos, con lo que hacen las personas que él mismo designa. Hay un vacío de poder porque tenemos un Codicen absolutamente deslegitimado. Yo creo que el Codicen y el Consejo de Secundaria tuvieron una actitud errática, (la semana pasada) como si estuvieran jugando al ping-pong: renuncio, no renuncio; doy plazo, no doy plazo; cedo, no cedo; hasta se habló de tregua. ¿Si hay tregua, estamos en guerra? Lo peor que puede pasarle a un sistema democrático, es que la máxima autoridad de la educación está absolutamente deslegitimada y con falta de credibilidad. Eso es lo que más me preocupa y por eso me preocupa la educación pública.
¿Cómo piensa que puede resolverse esta situación?
Yo sé que lo que voy a decir es duro, pero estoy pensando seriamente en acogerme a los beneficios jubilatorios. Se ha politizado tanto el tema de la educación, que la situación está muy complicada y no veo la voluntad política real nadie de que las cosas realmente vayan hacia lo central, que son los estudiantes. Al final uno se plantea dedicar los esfuerzos desde otro lado, más libre, sin estar sometida a jerarquía. Ver la angustia de los estudiantes por sus exámenes, me llevó a pensar: ¿Yo sigo siendo cómplice de esto? Cuando me reuní con el presidente, lo que le pedí fue que diera una señal.
¿Y qué le contestó?
¿Y qué le contestó?
Él me miró con un profundo cariño y comprensión, le vi en los ojos una sintonía de qué queremos algo mejor y no sabemos cómo hacerlo y no podemos.
¿Pero, piensa que la dio?
Yo creo que la dio, pero no se la comprendieron.
¿En qué momento fue eso concretamente?
Yo sigo insistiendo que a mí me dolió mucho cuando escuché a Seoane (que) salió diciendo que no había pasado nada entre Codicen y Secundaria. Esas declaraciones terminaron por apagar una hoguera con un balde de nafta. ¡Basta por favor! Ya son siete años. Se suponía que el Frente iba a ser una bisagra.
¿Desde dónde piensa seguir luchando?
No sé.
¿Desde la política?
La clase política no me gusta. Yo trabajé siete años en el Senado y me fui por una cuestión de principios. No me gustan los acomodos. No me gusta cómo se practica la política. Voy a seguir luchando. No sé desde dónde.
¿Y cuando dice que no ve voluntad política a quién se refiere?
Y las autoridades de la educación fueron votadas políticamente. Y los representantes de los docentes también son políticos porque fueron nombrados por los sindicatos, no son representantes de los docentes, son representantes de los sindicatos. Entonces todo el conflicto político estalló en la educación. Y lo que me da rabia, sobre todo por los alumnos, es que todos, especialmente los del partido de gobierno, miran para otro lado: ‘Bueno, acá no pasa nada, barremos debajo de la alfombra’. Y la oposición hace su juego. Y en el medio están los estudiantes. Yo saco de toda esta historia al presidente y al vicepresidente. Yo sé que ellos tienen las mejores intenciones y los mejores objetivos pero el tema es si lo pueden hacer. El golpe a la educación pública que se está dando en este momento es de parte de sectores políticos minoritarios: MPP, PCU y CAP –L, que tienen más cargos que votos. El MPP tiene votos, pero los votos son del presidente, si alguien se llamó a engaño que se votó al resto…
¿En el Frente Amplio hay dos programas de educación que estuvieron en choque la semana pasada?
No, no hay proyecto de educación, sino se hubiera comenzado a aplicar. Lo que hay son tensiones. Yo siempre digo que este gobierno me hace acordar – lo digo con mucho dolor – a principios del siglo XX, cuando el país tenía dos gobiernos. Había que ir a consultar a Aparicio Saravia, a la estancia El Cordobés, y a José Batlle y Ordoñez a la casa de gobierno. Es evidente que dentro del Frente Amplio existen dos proyectos de país y objetivos educativos en tensión, pero no proyecto de educación. Y si las autoridades son del mismo color político que el sindicato, no hay concepción de Estado. El Estado no puede estar teñido de lo político partidario de poco nivel. El estado no se puede usar para pasar facturas políticas y eso es lo que ocurre todos los días.
¿Es como si no tuviéramos Estado?
¿Es como si no tuviéramos Estado?
No, no es que no tengamos Estado, lo tenemos bastante vapuleado. Al primero que se le ocurrió la idea de los sindicatos adentro del Estado fue a Mussolini. Eso es corporativismo y eso es muy peligroso. Miren lo que pasa en Argentina, Perón fue un discípulo expreso de Mussolini. Uruguay y Chile eran los dos países de América Latina que se había salvado del populismo, y Brasil también. Por eso es que tenemos una democracia bien consolidada. Pero tenemos que tener cuidado con eso.
¿Esto viene del gobierno anterior o es de este?
Yo creo que sí. La diferencia es que en el gobierno anterior tenías que ser socialista o de la Vertiente para tener peso. Además, era gente con más “cuadro”, con más formación. Y había mayor criterio institucional, tanto en el Codicen, como en Secundaria. Pero también era gente que entraba revoleando el poncho y se peleaban por los cargos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario