El 18 de julio
de 1830 se juró nuestra primera Constitución. A partir de ese momento la
Provincia Oriental se organizó como Estado soberano e independiente. En aquella
Constitución se define al estado como la asociación política de todos los
ciudadanos comprendidos en su territorio, se afirma la independencia de todo
poder extranjero y los derechos de los habitantes a ser protegidos en el goce
de su vida, honor, libertad, seguridad, trabajo y propiedad. La Constitución
establecía un régimen unitario y la República estaba dividida en nueve
departamentos.
En momentos en los que se señala que “lo político” está sobre “lo
jurídico” es bueno recordar que ella nos ampara y protege de los abusos del
poder. Dentro de la ley, todo. Fuera de la ley, nada.
¡Viva la
Constitución!
No hay comentarios:
Publicar un comentario