“Café por medio, en su departamento de la calle Constituyente, el ex senador Manuel Flores Mora contó al autor de este trabajo una anécdota de don Luis Batlle Berres, siendo éste presidente del Consejo de Gobierno en 1954.
En esa ocasión, Batlle recibió la visita en apariencia protocolar del entonces inspector general del Ejército, general Pedro Sicco. A poco de conversar, Sicco le hizo una serie de planteamientos amenazantes en nombre de las FFAA. Don Luis lo escuchó en silencio. Luego le preguntó como distraído:
- ¿Qué hora es, general?
- Las cinco, presidente.
Luis Batlle se levantó y le tendió la mano, forzando una despedida.
- Lo espero a las siete en punto. Venga con su renuncia firmada.
(*) “Tropezones y porrazos. Un siglo de política uruguaya”, César Di Candia, pág. 38
No hay comentarios:
Publicar un comentario