Principio quieren las cosas

Dr. Jorge Batlle

Por Jorge Batlle (*)

La reciente designación del nuevo Presidente del Consejo de Secundaria ha sido bien vista por los sectores que apoyan al Presidente de la República en su esfuerzo por mejorar la situación educativa en la enseñanza media. 

Todos los uruguayos, que durante mucho tiempo estuvimos orgullosos de nuestra educación, sentimos con gran angustia que hemos perdido ese nivel y es por ello que los Partidos Tradicionales, haciéndose eco de ese sentimiento colectivo, han resuelto apoyar al Presidente de la República en sus intentos de modificar, mejorando, los niveles actuales de la enseñanza. 

La enseñanza media se divide en dos ciclos: 1) ciclo básico común de tres años; y 2) ciclo preuniversitario con un cuarto año común y dos años con orientaciones humanísticas, científicas o artísticas, preparatorios al ingreso al nivel terciario.

En el ciclo básico la no promoción alcanza al 45,05% y la repetición alcanza al 43%. Si al mismo tiempo uno observa los números de primaria, en Montevideo, por ejemplo, ellos son los siguientes: del primero al sexto año escolar la repetición es del 6,5% de los alumnos. La cifra de repetición del sexto año es tan sólo del 1,8%. 

Lo que no se entiende es que repitan en sexto año tan solo el 1,8% de todos los alumnos de primaria y que cuando esos niños pasan al año siguiente al ciclo básico (primer año de liceo), la repetición suba al 43%. Algo anda mal. 

Por lo tanto, si queremos mejorar el ciclo básico tenemos que analizar los números de primaria porque posiblemente ahí este el problema real de la falla de los estudiantes de secundaria del ciclo básico. Esto significa que el mismo esfuerzo que el Sr. Presidente de la República ha hecho en la designación del Insp. de Física, Ing. Tinetto para Secundaria, se debe hacer para el Presidente de Primaria. 

Si primaria y secundaria no trabajan en común para analizar la razón de esta tremenda brecha entre estas dos cifras (1,8% de repetición en primaria y 43% de repetición en el ciclo básico), todos los esfuerzos que se están haciendo por parte del Sr. Presidente de la República para mejorar la enseñanza básica del Uruguay se frustrarán.

El estudiante es un todo, desde el preescolar hasta que termina la enseñanza. No se puede analizar y menos resolver por compartimentos estancos como si todos fueran independientes unos de otros.

Alcanza con advertir, por ejemplo, que el ingreso mayor de estudiante a UTU, luego del ciclo básico, no proviene de la UTU sino de alumnos de secundaria que habiendo culminado el ciclo básico prefieren continuar su aprendizaje en la UTU.

Es cierto, principio quieren las cosas, pero requieren también continuidad en un camino de análisis y acciones globales, no parciales, porque la enseñanza es precisamente eso, global, desde el preescolar hasta el conocimiento terciario.

(*) Abogado. Ex presidente de la República (2000-2005)