Juan Amaro |
El
director colorado de ANCAP, Juan Amaro dijo al diario Ultimas Noticias que el
nacimiento de ALUR fue muy cuestionado y que la empresa debe lograr financiarse
por sí misma y terminar con la relación de dependencia económica que tiene con ANCAP.
Este año se destinarán US$ 200 millones del total del presupuesto quinquenal
que tiene el ente petrolero para terminar las obras que hay pendientes como las
de modernización de las plantas de portland en Minas y Paysandú y la construcción
de una nueva planta de biodiesel en Capurro
ANCAP registró fuertes pérdidas económicas a lo largo
de 2011. ¿Cuáles fueron las causantes?
Efectivamente, ANCAP perdió U$S 80 millones el año
pasado. Lo que tuvo incidencia exclusiva fue tener los precios debajo de la
paramétrica, tuvimos el petróleo mucho más alto y en algunos meses el dólar
también más alto de lo previsto. Eso llevó a un déficit que estaba previsto,
denunciamos la necesidad de que se compartiera el sacrificio con el Ministerio
de Economía, que tomara medidas bajando el Imesi y así poder luchar contra la
inflación.
¿Cuál es su postura con respecto a ALUR?
Si uno mira el nacimiento es polémico y discutible.
Desde mi punto de vista los que lo defienden son los intangibles sociales, porque
la localidad de Bella Unión vive en torno al emprendimiento industrial. Es
opinable y discutible, no estuvimos en el nacimiento, pero hay intangibles
sociales que hoy lo justifican. En el tema ALUR no hemos votado avales, ANCAP no
puede seguir siendo la garantía sino que con lo que significa en el peso del
organismo tiene que tener vida propia y financiación propia, y hemos tenido
votos en contra en cuanto a avales que se han propuesto.
En el presente el peso de ALUR es del 25%, en el correr
de los años va a bajar al 10 %, porque las actividades van a pasar más por el
etanol y el biodiesel, por lo que tomará otra dimensión.
Hoy nuevamente el precio del barril de Brent está por
encima de lo fijado en la paramétrica, ¿se prevé un aumento en el precio del
combustible?
Después del aumento del 6 % se había logrado un
equilibrio, hoy hay preocupación porque los precios están al alza y hay una
diferencia de seis dólares en el barril de petróleo. Es una preocupación que
vamos a estar profundizando en el directorio.
El tema del desfase entre la paramétrica y los precios
viene desde 2010.
Todo indicaba que ahora se iba a estabilizar el barril
en U$S 130; el organismo tendría cifras buenas de ser así, pero en vez de
descender ascendió el precio.
ANCAP tiene un presupuesto quinquenal de U$S 1.000
millones, ¿cuánto se destinará de esa cifra para este año?
Este año se van a utilizar U$S 200 millones de
inversión para terminar las obras que están previstas en pórtland y para el
resto de pagos de las obras que se hicieron en la refinería. Hay otras obras
que vienen lateralmente que también son importantes pero no entran dentro del
presupuesto anual proyectado. La idea es no pasarnos de este tope para terminar
lo que está en curso.
La obra en Paysandú para pasar de fueloil a carbón de
petróleo y modernizar los hornos comienza este año, lo que supera los U$S 80
millones. La idea es modernizar la planta porque tiene un uso de combustible
muy caro. En Minas también hay una obra para modernizar los hornos. La culminación
está fijada entre 2013 y 2014.
Para construir la planta de biodiesel en Capurro hay un
inicio previsto para abril de este año que demanda una inversión de U$S 15
millones, lo que va a permitir cumplir con la mezcla obligatoria del 5%.
En Paysandú para la planta de etanol se están cerrando
las negociaciones bajo el sistema de fideicomiso con una empresa privada en el
camino de la asociación. El objetivo es iniciar las obras en junio para
terminarlas en 2014.
¿Cómo afectó la huelga del sector metalúrgico en la
terminación de las obras de la refinería?
El trabajo era compatible entre los funcionarios de ANCAP más las empresas privadas metalúrgicas; si uno paraba, se paraba toda la obra. Eso significó perjuicios muy grandes, una obra prevista para terminar en 60 días a fin de primavera, cuando la temperatura no está alta, se atrasó.
El trabajo era compatible entre los funcionarios de ANCAP más las empresas privadas metalúrgicas; si uno paraba, se paraba toda la obra. Eso significó perjuicios muy grandes, una obra prevista para terminar en 60 días a fin de primavera, cuando la temperatura no está alta, se atrasó.
Le hizo daño a las cuentas de ANCAP y son daños que uno
no tiene previstos. Tuvimos que tomar alguna medida de emergencia como
descargar petróleo en la boya petrolera limpiando el oleoducto para poder de
esa forma cumplir con el abastecimiento de Uruguay, si no con la demanda de UTE
hubiéramos tenido desabastecimiento y eso sería un desastre en materia
productiva y turística en general.
¿Cuál debe ser el rol de los directores de la oposición
en los entes?
Controlar es la primera tarea. Lo que ha ocurrido acá
en ANCAP, donde funcionamos con buena relación, es aportar ideas, tratamos de
sumar, cuando discrepamos tratamos de convencer para que el camino que se
recorra sea diferente. Cuando discrepamos tratamos de tener incidencia y ver
alguna alternativa en el camino. Por ejemplo, hemos discrepado en las compras
financiadas a Venezuela, con una deuda de U$S 700 millones no podemos seguir
haciéndola crecer. Reconocemos que financieramente es bueno, pero genera
dependencia y nos parece que no está bien, por eso hemos votado en contra y lo
decimos claramente.
(*) Extraido del diario Ultimas Noticias
(20 de febrero de 2012)
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