Tras el "firmazo" se viene el "timbrazo". Las cifras finales se conocerán este miércoles 3 de agosto, pero los promotores del plebiscito para reformar la legislación sobre los menores infractores dijeron que la jornada de recolección de firmas del pasado sábado fue un éxito.
El mensaje de los dirigentes colorados y blancos a su militancia es claro: la jornada de recolección de firmas del sábado fue solo el comienzo. Juntaron 30.000 firmas y llegaron a las 200.000, pero el objetivo, en particular del líder de Vamos Uruguay, Pedro Bordaberry, es alcanzar el medio millón de voluntades.
"En algunos lugares hubo cola, firmaron muchos jóvenes a pesar de lo que dicen los agentes del gobierno", señaló el diputado Gustavo Borsari, delegado nacionalista en la Comisión por la Seguridad para Vivir en Paz-Yo Firmo.
Borsari señaló que recibieron una respuesta "abrumadora y contundente", a pesar del mal tiempo. "Superamos ampliamente las 200.000 firmas. Antes de diciembre vamos a llegar al mínimo requerido. Está decidido que se presentará un número muy superior a ése", insistió el legislador blanco.
Por su parte, el diputado Germán Cardozo, delegado colorado en la comisión, confirmó que el grupo volverá a reunirse por estos días para evaluar nuevas "movidas". Una de ellas se llamaría "el timbrazo", para evitar que los militantes pasen frío nuevamente.
La idea es recorrer casa por casa en los barrios de Montevideo y localidades del interior.
"Cuando empezamos esto, el Frente Amplio y el Pit-Cnt decían que no teníamos capacidad de organización. El sábado demostramos algo de lo que podemos hacer, fue como una prueba de fuego", dijo Cardozo.
No obstante, la recolección en puestos fijos volverá, pero será más cerca de la primavera. Los dirigentes creen que una "movida" similar al "firmazo" durante una jornada de calor podría sumar 100.000 rúbricas.
La comisión destinará esta semana a hacer un "inventario" de las firmas recogidas en todo el país para saber con exactitud la cantidad que falta.
"Las firmas están, hay que buscarlas y contabilizarlas", aseveraron fuentes del grupo que además de representantes políticos cuenta con dirigentes sociales, empresariales y familiares y víctimas del delito.
"Muchos dirigentes `aprietan` firmas para presentarlas en un acto con los líderes. Esto pasa sobre todo en el interior del país".
De esa forma explicó una figura partidaria la dificultad para un conteo definitivo de las firmas alcanzadas, tanto en "el firmazo" como en los tres meses de campaña previa.
El firmazo se produjo con escasa presencia de distintivos partidarios y militantes de distinto origen mezclados.
A ellos se sumaron los grupos sociales que integran la comisión, víctimas del delito o familiares de personas asesinadas por la delincuencia.
Según voceros de la comisión, muchos firmantes son votantes del Frente Amplio, "y es probable que lo sigan votando". Se trata de frentistas que "están sensibilizados por una realidad que rompe los ojos", dijeron.
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