Durante esta última semana, hubo en Argentina
manifestaciones contra el gobierno; mayores manifestaciones indignadas que las
caceroleadas que voltearon a De la Rúa. ¿De dónde viene el peligro? Se vio a la
presidente Cristina, muy alterada; algo malo ronda su situación.
Recuerdo un
autor inteligente, Michel David-Well, que se dedicó a un oficio difícil:
-Mi tarea
consiste en entender el mundo y anticipar lo que va a venir. Los países
sometidos a un programa económico impracticable, pueden subsistir por algún
tiempo, beneficiados por la insuficiencia de la información, pero el
crecimiento de los datos desacomoda cada vez más, a los retardados. El
voluntarismo es hijo de la desinformación y de las confusiones. Un gobierno
afuera de su tiempo, no atiende a los indicadores, ni a las variables. Bajo un
manto de sueños, avisa: Voy a revaluar; o dice: Voy a devaluar. Y a veces no
solo lo dice ¡Intenta hacerlo!
COMENTO:
Estos párrafos son para pensarlos en ambas márgenes del Plata. Después de cada
error básico, queda el tendal. Si alguien duda de lo que digo, puede
preguntarle al señor Cavallo, que pergeñó la ley de convertibilidad y terminó
en un corralito, una de las explosiones legales más dañinas que se conocen.
Arthur Nussbaum, autor de un formidable tratado sobre derecho monetario
escribió: "Prometer no devaluar es como prometer no enfermarse." Con
las inversiones, que son la llave del crecimiento, suele pasar lo mismo. Hace
10 años, Cristina Fernández pudo leer a Weill y no le prestó atención.
-"También
la inversión o la desinversión funcionan como un precio cualquiera. Los
movimientos de la inversión son olas que se forman con legión de opiniones, a
veces a favor o a veces en contra. El gran dinero se desplaza como una marea
que deriva de las expectativas; son coros que abarcan el mundo entero
("Fiebre del oro", "efecto Klondike" o sus contrarios: fobia,
pánico, fuga de capitales)".
COMENTO: La
fuga de capitales es un golpe de gracia. Hay mecanismos que ninguna fuerza
puede dominar. Estados Unidos está en babia cuando se infla una burbuja
inmobiliaria y seis años después sigue groggy. Europa desconfía y recibe un
castigo que no cesa. O puede suceder al revés; del modo más paradójico: un país
inmenso y muy pobre como China, con un gobierno teóricamente contrario al capitalismo,
entiende mejor que el resto del mundo cómo manejar las inversiones extranjeras;
y crece más que nadie. Al Uruguay le resulta imposible pensar que los medios de
producción dejen de estar en manos del Estado. Se funde un ente autónomo y se
lo convierte en una empresa privada y cuando se funde esa empresa, entonces la
solución es volver a crear la misma compañía, pero más indefensa y garantizada
por el Estado.
Leo:
"Los funcionarios de Pluna que proponen formar una aerolínea cooperativa
con apoyo estatal, rechazan el planteo del senador Heber para tomar préstamos
personales del Banco República que se destinen a capitalizar la nueva empresa;
no están dispuestos a arriesgar sus bienes en forma particular luego de haber
quedado sin trabajo." (El País, 11/11/12).
¿Los
funcionarios son más inteligentes que los gobernantes? ¡NO! Los funcionarios
piensan en "su" plata; y los que proponen una cooperativa, manejan
"plata ajena". Dice David-Weill: "Europa se defiende de la
globalización económica, en lugar de aprovechar sus ventajas. Europa añora la
inflación, el déficit fiscal y todas las enfermedades de un mundo regulado por
el Estado. No califico voluntades o intenciones; no defiendo un punto de vista
político; solo me refiero a la mecánica de los hechos." COMENTO: Pregunte
por Grecia, Portugal, Italia, España… No fueron prudentes en el manejo del
dinero público.
-
"Resulta extraño comprobar que los gobiernos que calificaron al marxismo
como una utopía, se hayan quedado sin percibir que la utopía se desplazaba.
Actualmente, también el Estado paternal es una utopía…, se vino abajo. Vivir a
la sombra de los errores históricos, provoca esto que estamos viendo: derrumbes
históricos", escribió el autor que estoy siguiendo. En Uruguay, recién
experimentamos en carne propia, lo que se predijo hace una década; y en esta
sección se publicó, en el 2005.
La debacle
no radica en una determinada compañía de aeronavegación, la debacle es seguir
pensando que comercio e industria son cosa del Estado. Los casos estratégicos
son excepcionales y pueden contarse con los dedos de la mano. Aparte de eso…
Las palabras que transcribí, van más allá del caso concreto, del síntoma de
proponer una cooperativa (huérfana de grandes gerentes y sin capital) para que
compita con las mejores y más feroces aerolíneas. Ningún emprendedor se atreve
a hacerlo y los empleados de Pluna, tampoco; pero el Estado ¿si?
Todo cuanto
digo; y más especialmente, los párrafos ajenos que cito, son demostraciones
intemporales, de alcance general y refieren a una estructura dentro de la cual
el país se debate. Cristina no está a tiempo de ahorrar: Argentina repartió
ventajitas y dinero público en subsidios colosales; estafó empresas y bonistas
hasta perder la confianza interna y externa. Argentina está humillada y sola.
Nadie cree en sus promesas.
Entre
nosotros, la enfermedad es menos grave. Pero el equipo de Astori enfrenta a una
barra brava, espejo de Buenos Aires: ¡Llegó el momento de repartir! ¿Repartir
hasta terminar el stock? Practican el asistencialismo crónico; dar y dar al
cien por cien, sin mirar a quien; combaten, el éxito del equipo económico, como
si su sabiduría fuera delito. El gasto público es una tentación infantil,
parecida a comer chocolate, pero en vez de gordura, provoca raquitismo. El
capital es cobarde y huye. ¡Pobre Cristina!
-"Las
encuestas son cada vez más mortales: la mayoría de los franceses viven
aterrorizados por la posibilidad de perder sus entradas fijas. Los gremios de
Francia declaran: "Toda innovación nos perjudica." Aunque las cosas
vayan de mal en peor, no quieren cambiar; no son capaces de atreverse; se han
hecho adictos a la paternalidad del Estado benefactor. Pero nada desprotege
más, que una buena sarta de protecciones anacrónicas. Hay muchos remedios que
agravan las enfermedades. Se puede morir de curaciones equivocadas. Cada empleo
que se mantiene injustificadamente, impide la creación de dos empleos
auténticos. Hay países que viven cada vez peor, deambulando por un museo de
momias laborales (AFE y…); allí, el futuro imita al pasado y por eso van para
atrás." (David-Weill)
PREGUNTO:
¿Queda alguien que defienda la inamovibilidad de los funcionarios públicos, sea
de origen legal o de hecho? Solo favorece a los malos funcionarios; e impide el
saneamiento de las empresas ¿Alguien defiende todavía los monopolios públicos?
Son la razón de ser del abuso en las tarifas, de los privilegios irritantes; y
del atraso tecnológico que nos aqueja. Pienso en los funcionarios ¿Quién, entre
ellos, se consagra por su performance? El Estado actúa sobre sus empleados, al
barrer; como si se tratara de basura. El sindicato también unifica por paquetes
colectivos y se opone a distinguir. Ergo: Los entes autónomos, pensados como
grandes empresas, resultan incapaces de crear riqueza.
Es por ese
lado que debe buscarse el cataplún de la catapluna. Eso; y el gasto público
manejado como bien de difunto.
(*)
Abogado. Periodista. Escritor. Historiador.
Fuente:
El País Digital
1 comentario:
No sea tan alarmista, sr. Maggi... cualquier crisis que se avecine las lumbreras del FA la resuelven fácil... por ejemplo, pueden proponer una campaña de recolección de firmas -bancada por los contribuyentes, faltaría más- para que la RAE suprima la palabra "crisis", y asunto resuelto!
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